sábado, 1 de junio de 2013

... ¿ AMOR ?...




Aún no lo sé, en que pensar y decir.

 ¿Por qué delinear frases, para que escribir?
Buscar dulces palabras, y escribir al amor,
hacer frases este día, cantar himnos de alegría,
decir y sentir dulces coplas de dolor.

No olvidar las dulces delicias,
rescatarlas de olvido y recordar
leve y tristemente las caricias
con gritos en el alma, sin poderlas ya borrar.

Fluyendo desde adentro, como notas musicales
cantos de dulce fuego y quizás frases de dolor,
sentirlas perdidas creciendo aún en el recuerdo,
añorando aquellos dias de momentos celestiales.

Es tan vano tratar de aniquilarlas,
despreciándolas del pensamiento,
y con el amargo éter destruirlas
borrando angustias y tormentos.

Quería huir tan velozmente,
escapar de todo, y quizás
hasta de la misma vida,
y fué tan torpe mi caida
que ni cuenta me dí
en ese instante, en ese momento.

Siempre, nos quedará el recuerdo,
y en el aire, quedará el perfume,
y en un libro, quizás una flor...
y dentro del pecho solo el dolor.

¿Para qué huir, escaparse y correr,
por qué angustiarse y sufrir,
y para qué y por qué escribirle al amor?

Jorge Naonse     1967/1969
Derechos Reservados.
 

ROTO CORAZÓN

Tardes de otoño, las esperanzas nacían,
dos almas soñaban, en  una sola ilusión,
aún triste o felices, tan bellos los dias...
despertar de caricias, comenzar la pasión.
...
Juventud tan lejana, cuanto hubimos soñado,
proyectando quimeras, y sentir sensaciones,
corto fué el tiempo, juntos hubimos amado...
Y tan largo ese hastío, alejando emociones.
...
Lentamente partía solo un año incipiente,
comenzar desencuentros, no se hizo esperar,
destrozaste mi alma, destruiste mi mente...
Por seis meses tan juntos, no supimos estar.
...
Y luego volviste, me tomaste en tus brazos,
con caricias dijiste, comenzar otra vez,
esa herida en el pecho, me había hecho pedazos
cicatrices cosidas, simpre quedan los trazos...
Las marcas quedaron, renacieron después.
...
Por casi tres años, creí haberlas borrado,
anidaban en mi, con amargo sabor,
por mas que cosieras, mi corazón destrozado...
Solo llagas quedaban, junto a furia y dolor.

José Gennaro