lunes, 30 de julio de 2012

Uno del otro

Nunca olvidaré esos días
se insinuaba la primavera
como olvidar, eras tan mía,
locura y pasión, eso tú eras.
...
Amada esposa, dulce mujer,
fruta ansiada de mi existencia,
nunca podré dejar de creer,
tú, eres amor, fuiste inocencia.
...
Atesorar, siempre has querido,
eterno candor, bella pureza,
tan dentro mío, siempre has estado,
amor me brindaste, entregaste belleza.
...
Dulce mujer eres de día,
pasión y fuego eres de noche,
llama tu eres, sin ti nada sería...
De nuestro amor, hicimos derroche.
...
Dos años partieron, el tiempo se iba,
esperando los dos, tan ansiado día,
en esos tiempos, fuiste mi vida...
Mis pensamientos, mis alegrías.
...
Amarnos siempre, los dos quisimos,
y muchas veces nos lastimamos,
al paso del tiempo, nos comprendimos...
Y uno del otro así seguimos.
...
Los días contábamos, uno tras otro,
casi dos años, fuimos perdiendo,
siempre amarnos, los dos quisimos,
y uno del otro, seguimos sintiendo.
...
Aquellas tardes, tan juntos estábamos,
fugaces momentos de nuestras vidas,
separarnos quisieron, mas solo lograron,
unirnos en uno, en esa partida.
...
Jorge Naonse 1969...hoy

martes, 24 de julio de 2012

RECUERDOS ( 3 )

































RECUERDOS  (3)













¿Era un baile, fiesta, reunión?

Fué allí, en los sesenta,

quizás, aún lo recuerdes...

En tu casa, un asalto.



Así, lo denominábamos.



La música ponía

en esa noche fría,

y tú, te acercaste a mí

lentamente, casi en silencio.



¿Tú lo recuerdas?



Con los primeros acordes

de la quinta sinfonía,

todos comenzaron a gritar

con esa furia loca,

y te acercaste a mí...

Casi, rozando mi boca.



Preguntaste. ¿Te gusta Beethoven?

Lo amo, respondí...

Lo escucho noche y día.



A partir de ese momento

y luego al nuevo día

comenzaron a latir nuestros corazones

en armoniosa y dulce sinfonía.



Así, comenzó todo,

Frágil y lento, en ese día,

comencé a visitarte

sin notarlo, iba a verte,

quizás un día o tarde por semana

sin pensar que al poco tiempo...

Fué de tarde y de mañana.



Esa sala, era nuestro lugar,

allí, todo iba a comenzar

casi, sin hablar

absortos escuchábamos

a Beethoven y Chopin,

embelesados, casi,

sin tocarnos, sin palabras,

simplemente, nos mirábamos,

y nuestros ojos, así hablaban.



Allí fué, se insinuaba,

en nuestras mentes

el fuego comenzaba,

y nuestros corazones...

Comenzaron a vibrar.



Tan sutil, tan lentamente

un incipiente amor nacía,

en nuestros cuerpos anidaba,

tan puro, tan frágil e inocente,

era el primero, primer amor...

De adolescente.



Al poco tiempo, sin darme cuenta,

en mi mente te instalaste,

y en mi virgen corazón te metiste.



En ese día me di cuenta,

dentro mío, estuviste,

y te dí ese primer beso,

y tú, me correspondiste.









Jorge Naonse 
Derechos 762.085


viernes, 20 de julio de 2012

Éramos cuatro

Éramos cuatro, desde ése día
éramos cuatro, yo lo sabía,
pero la vida me fue alejando
por un camino jamás vivido
por un camino, desconocido.
...
Sin embargo mis pensamientos
los recordaba en todo momento,
aquella noche de cumpleaños...
Éramos cuatro que festejábamos,
con Barbagallo y Domingo
Lo conocí, a Federico.
...
Yo, no tenía ningún amigo,
y por vez primera sentí
que tenía tres,
sí, lo creí.
...
A Domingo lo conocí
en el taller del inventor,
muchos días juntos pasábamos
y los recuerdo con amor.
...
Con él leí a Hermann Hesse,
con él leí a Ingenieros,
con él entendí a Beethoven
Mozart y muchos más,
con él aprendí por vez primera
que un amigo verdadero
tendría ahora, de aquí en más.
A través de él,lo conocí a Barbagallo,
un chico muy extraño,
con poderes desconocidos,
en su casa, realizaba magia,
había descifrado un gran secreto,
el secreto de Alí Babá.
...
Un día dijo, sésamo ábrete
y yo aturdido, sorprendido,
vi, las maravillas del más allá.

Barbagallo, amigo de mi amigo,
hombre de leyes que conocí,
al ser amigo de mi amigo
también lo era para mí.
...
Así llegó el cumpleaños
que festejaba con mi amigos,
el cuarteto se completaba
con la llegada de Federico.
...
Muchacho locuaz, con mucho sentido,
nos relataba...las experiencias,
que junto a Barbagallo, había vivido,
él lo había llevado, arrastrado,
a un pequeño consultorio,
y con lujo de detalles, relataba,
a lo que su amigo
lo había inducido.
...
Éramos cuatro.
 ¿Lo seguiremos siendo?
...
Han pasado tantos años
sin saber con qué destino
yo me abrí de ésos amigos
no por diferencias, yo entendí,
nuestros caminos, eran distintos.
...
Cuantas nostalgias, se aparecían
en el día del amigo,
cuantas tristezas y sinsabores
que mi ser ha padecido.
¿Qué había sido de mi maestro?
¿Qué habia sido de mis amigos?
...
Tras muchos años de buscarlos,
un día hubico a Federico,
la emoción de verlo, escucharlo,
me es imposible describirla,
así charlamos ése martes
y me contó de Domingo,
de Barbagallo, de su vida,
y lo que fue su camino,
yo lo escuchaba embelezado
y me contaba, me contaba.
...
¿Que había sido de sus amigos?
Cuantas cosas, cuantas cosas,
que yo había perdido,
han pasado tantos años...
Y éramos cuatro,
ojalá sigamos siéndolo,
es todo lo que les pido.


Jorge Naonse 2008

martes, 17 de julio de 2012

Solo espero

Nublado cielo, de aspecto gris y encapotado,
el frio invierno invade el alma cual crepúsculo,
las tibias noches se han marchado en el cúmulo del tiempo,
y quedan los vestigios, embargando el pensamiento.
...
Transitan por la mente con disímiles pensares,
senderos de belleza, plenilunios y alboradas,
fragmentos de una vida, reflejan a raudales,
y sola queda el alma, tan triste acongojada.
...
Con el rumbo incierto, vislumbro mi pasado,
en tinieblas veo, momentos de mi vida,
con pesar del alma, triste y desolado,
esperando estoy, mi triste partida.
...
A nadie he dañado, en mi paso peregrino,
quizás tuve las fallas de todos los humanos,
espinas tan lejanas, marcaron mi camino...
Y daño es lo que obtuve, en  ese tiempo arcano.
...
A nadie culparé de mis adversos tiempos,
la vida impredecible, se ensañó conmigo,
tú, muy bien lo sabes, dañaste mis momentos...
Y triste y solo espero, la duda es mi castigo.
...
Jorge Naonse

lunes, 9 de julio de 2012

Seguiré Rezando

Queridos padres, desde el año ochenta y uno seguiré rezando,
se han marchado muy jóvenes, apenas tenías sesenta y ocho
padre mio, y tú, querida y amada madre, apenas había cumplido
sesenta y tres, desde ese nefasto año, lo sigo haciendo dos veces
por día..
...
Desde el año dos mil diez, también rezo por ti, querido Alejandro,
que apenas te conocí por un día, y sin embargo,
pareciese que te conocí hace tanto tiempo,
para que te mejores y sanes, aunque tu madre no crea en Dios,
yo, rezaré por los dos.
...
También, rezaré por ti y por tu hijo, querida amiga
Martha Lucía, ya que ambos viven en este turbulento
mundo, difícil y preocupante, para una madre sola
y un hijo adolescente.
...
También rezaré por ti, querida Andrea, porque has
perdido dos seres que son lo mas grande de la vida,
Tu amada madre y tu entrañable hija,
para que puedas renacer de ese inmenso dolor.
Y no pierdas las esperanzas, aquí, simplemente,
estamos de paso, lo definitivo, lo real, llegará un día.
 ...
También rezaré por ti. querida y lejana Tucumana,
aunque no profeses la misma religión, porque Dios
hay uno solo, rezaré por tu hijo que fue inducido,
rezaré por tu hijo que está al lado tuyo,
y que siempre te acompañe.
....
También rezaré por ti querido Manu,
fueron pocos los meses que estuviste aquí,
suficientes para conocerte y saber de tu candor y pureza,
y sin poder nunca comprender el por que de tu destino.
....
 Por todos ustedes y mi familia, rezaré hasta
el fin de mis días, porque creo en Dios...
Y algún día, nos encontraremos todos.
....
También seguiré rezando
por ti, querida y amada hija,
para que tus anhelos se cumplan,
que formes tu familia y sigas
el camino de la vida y
llenes de alegrías este
crepúsculo tan cercano
de dos vidas...
Amén.


Señor Jesús,
me pongo en tu Presencia,
implorando la Gracia de la sanación.
De la sanación física y espiritual.
Te pido el Espíritu Santo ..
para que con su fuego abrasador,
me purifique, para que pase derramándose,
para que pase sobre todo mi Ser y así
santifique mi cuerpo, mi Alma y mi corazón.
Haciendo nuevas todas las cosas en Mí.
Señor concédeme tu Misericordia,
la gracia de la sanación interior, para que
pueda Bendecirte y Adorarte siempre.
Amén.

Escribir un pedido o agradecimiento al Padre Mario
Sitio del Padre Mario



miércoles, 4 de julio de 2012

TRAZANDO CAMINOS

Dulces quimeras, tangibles sueños,
lo imposible, jamás existió
dorado encanto, fuimos los dueños...
De nuestras almas, jamás se borró.

Ese fue el año que decidimos,
fundir ambas en una, dos ilusiones,
fue nuestro ese año, así lo quisimos...
Fundir en un alma, dos corazones.

Fue ese mes de setiembre, de primavera
los dos prometimos, etermo el amor,
y fue en esos dias, mi alma a tu vera...
Contigo quedó, envuelta en pasión.

No hubo dudas ni sombras,
así fuimos marcando nuestro camino,
soñando así fuimos, en mi alma se ahonda,
dos sendas en una, nuestro destino.

Tempestad y peñascos, alejándolos fuimos,
así solo nosotros, debíamos ser,
el uno del otro, en un solo camino...
El uno del otro, en un solo querer.

El tiempo de prisa, los años se han ido,
el uno del otro, así seguimos los dos,
promesas, cariños, en mi han quedado...
Así juntos quedamos, tan juntos tu y yo.

José Gennaro 1973


lunes, 2 de julio de 2012

...¿Será?...

Dia gris, de amargo desencanto
encapotado cielo con sutil lamento,
las horas así desfilan, en amargo canto
y dentro de mi alma, recuerdos y momentos.
...
La triste despedida permanece todavía,
su lánguido recuerdo está aún presente
tristezas y alegrías hoy siguen en mi mente...
Sin denotar olvidos recrudecen este día.
...
Como faro en la distancia de titilante luz,
refleja en mi las sombras del lento caminar,
con  su tenue reflejo no logro vislumbrar, 
tan solo desaciertos me fijan a esa cruz.
...
Será quizás el día, con cielo nubarroso,
o será mi pensamiento, encadenando sueños,
será mi corazón, con tinte tenebroso...
Será el frío manto, que se hizo dueño.
...
Con alma y pensamiento hoy quiero despejar,
el errabundo andar de todas mis tristezas,
quizás tan solo pueda, mi mente así acallar...
Y olvidarlo todo, incluso las promesas.
...

Jorge Naonse 1967 / 1969