sábado, 2 de julio de 2011

SI YO PUDIERA...

Tu nombre es Rosa, fragancias tienes,
entre las flores tan bella eres
y ya te has ido, estás distante...
Aún siento tu aroma, mi flor fragante.
...
Aún recuerdo aquellos días,
aquel pueblito tan junto al mar
por las laderas tú, me corrías,
en esos valles, sin descansar.
...
No me alcanzabas, te enfurecías,
Madre querida, sublime ser,
olvidarme de tí, nunca podría...
Todo daría, y volverte a ver.
...
Tan joven eras y te marchaste,
detrás de él, que había partido,
a pocos meses tú, nos dejaste...
Con él te fuiste, Padre querido.
...
A tí también, hoy mucho extraño,
querido Padre, lleno de amor,
tan joven eras, en aquel año,
y en mi alma entera, quedó dolor.
...
Así tres décadas, se fueron yendo,
aún recuerdo furtivos besos,
de mi alma, nunca partieron...
Días y noches, a los dos rezo.
...
Padres queridos, se acerca el tiempo,
volver a verlos poder quisiera,
ya menos falta y mi pensamiento...
Estar junto a ustedes, si yo pudiera.
...
Mi pensamiento guarda recuerdos,
bellos momentos, nosotros juntos,
nunca se irán de mis momentos...
Están conmigo, en este mundo.
...
José Gennaro 10 / 06 / 2010
Dedicado a mis padres, Pascual y Rosa

INVIERNO


Día gris, nublado y con viento,
el asomar del sol no aparece
llenos de sombras, mis pensamientos
en este invierno que todo ennegrece.
...
Húnedas calles con tristes sombras,
árboles secos sin fronda están
las imágenes que nos rondan
como fantasmas se quedarán.
...
Amaneceres sin tibio sol
en tristes penumbras sumen la vida,
débil ocaso de atardeceres,
agrestes momentos en nuestro amor.
...
Gélidos días tan destemplados
dejan penumbras en nuestos cuerpos,
traen recuerdos tan olvidados...
Leves nostalgias, infértil desierto.
...
Noches tan largas que nunca acaban,
tan cortos días casi sin alba,
atardeceres mudos, casi sin habla,
apoderándose de nuestras almas.
...
Fría llovizna, áspero cielo,
que nos invaden tan lentamente,
frondas secas, cubren los suelos,
y nuestras almas y nuestras mentes.
...
Noches sin calma, presagian tormenta,
gestándose van, en nuestras cuerpos,
helados días sin darnos cuenta...
Sin percatarnos, matamos lo nuestro.
...
Destellos de luz, ensombreciendo fuimos,
apagamos las llamas de nuestro fuego,
nada quedó, todo perdimos...
Esparcidos quedamos, los dos en el cieno.
...


Jorge Naonse  
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