lunes, 30 de enero de 2012

Desierto amor

Cálida noche, tan plena tu de strellas,
inmenso cielo, poblado de inocencia,
fulguran astros, pasado y existencias,
es noche plena, y soñábamos con ellas.
...
Leves retazos restan,  dos almas tan unidas,
solo quebranto, de inútiles proyectos,
vanos esfuerzos, fué útil la partida...
Nostalgia solo resta, y un amor desierto.
...
Plasmando en letras, mi sentir presiento,
amalgamando versos hacia el amor perdido,
ahondando  lo insondable dibujo pensamientos,
sin encontrar la luz, recuerdos que se han ido.
...
Es la fiel marea, que nubla pensamientos,
como espesa bruma, recorre los caminos,
como filosa daga lacera  los momentos...
Hacia perdida gloria, y dos la prometimos.
...
Tú, quietud nocturna, te llevas mis anhelos,
hacia  infinito éter, arrastras mis delirios,
caricias que se han ido, me dejas el martirio...
Te quedas con mi alma, la sumes en desvelos.

José Gennaro 2012





domingo, 29 de enero de 2012

Ajada y triste rosa

Abro el libro de amarillentas páginas,
mi vista recorre las vetustas letras,
ojos cansinos recorren sus palabras,
reminicencias leo, pasado y solo olvido.
...
Entre sus hojas, descubro aquella rosa,
ajada y seca, aplastada por el tiempo,
ni rastros quedan de pimpollo y primorosa,
seca está  de amor, y todo sentimiento.
...
Pensar que antaño, resplandeciente estaba,
los pétalos rojizos, cada uno apretujados,
cónica y redonda, estaba así formada...
La luz irradiaba, destellos fragmentados.
...
 Mi triste mente asume, tan solo los recuerdos,
mi corazón se aisla con amargo llanto,
inútiles proyectos, vanos los momentos,
penas dentro el alma, y un amargo canto.
...
Jorge Naonse 2012
 




sábado, 28 de enero de 2012

Justo un año (1)

Justo un año, y en ti vivo
tu aliento respiro como fuente
mi vida llena dulcemente
y detrás de tu sombra aquí sigo.
...
Justo un año, ha cambiado mi existencia
 transformando tú mi vida tenuamente
Aunque a veces  extrañamente,
te vas, y quédome solo con tu ausencia.
...
Justo un año, convertido en primavera
el invierno, mas oscuro de mi vida,
al brillar entre las flores solo una,
y esa eres tú, mi preferida,
con tu fulgor brillas como ninguna...
Haciendo realidad, toda quimera.
...
A veces triste, otras contento,
a tu lado así vivo, así lo siento,
dias felices, alegres  y de encanto,
desde hace justo, justo un año.
...
Justo un año y no se apagan,
mis ansias delirios y locuras
como fuego se propagan,
me queman y devoran,
y con ansias destructoras
me corroen y obsesionan
cuando tu, no estás conmigo...
Y a tu lado yo no estoy.
...
Por eso aquí  hoy,
vengo a suplicarte,
mi obsesión es adorarte,
mi meta, tu cariño,
tu ternura es mi delirio,
tu pasión una locura
y quema, lastima y hace daño...
Desde hace, justo, justo un año.


Jorge Naonse 1967/1969

Justo un año (2)

Y no te miento, por mi boca tú lo sabes
todo, todo lo que siento,
en mis ojos que te adoran
verás un mundo de pasión,
desde hace justo un año,
me intereso de tu vida
de tus pasos, tu destino,
que es el cruce de dos sendas...
Y camino de mi mismo,
la sonrisa de tu boca
el ver de tu mirada
el reflejo de tus ojos
y todo de ti, mi amor mi amada.

Poco elogio el de tu boca,
que me enciende si me toca.

Todo esto que te escribo,
todo esto que te nombro,
que me alegra y atormenta,
y me brinda el paraíso
y luego, luego me hace daño,
es todo lo que pasa...
Desde hace justo, justo un año.

Justo un año que vivimos
de una forma diferente,
doce meses han cambiado
nuestras vidas nuestras sendas,
cuantas cosas hemos vivido
en nuestro camino recorrido,
y cuantos sueños realizados
en nuestros cuerpos hicieron nido.

Justo un año, y los albores de dos vidas
han podido fijar ya nuestro rumbo,
doce meses tan solo han pasado,
desde el momento que estuviste a mi lado.

Cuantas cosas han pasado desde entonces
poco tiempo por la obra que tu has hecho,
doce meses de ternura aquí en mi pecho
que se expanden como fuego desde adentro.

Y tu lo sabes, cuanto hemos vivido,
y yo lo sé, lo que es amar y ser querido.

Jorge Naonse 1967/1969

Justo un año (3)

En corto tiempo hemos amado, hemos sufrido
tan solo un año, y te quiero y sin engaño.
¿Para qué?.. Para el olvido.
...
Así concluye todo un año de caricias y desvelos,
del amor que nos ahogaba,
el mas leve rastro ha quedado en nuestros pechos.
...
Promesa, cariños, concluyen de esta forma,
las ansias de fundirnos se esfuman mas y mas,
así concluyen doce meses de pasión,
y se truncan nuestras mentes, en ignota rebelión.
...
Y no lo ignoro
nada ya queda del amor que nos juramos,


tú me quieres, yo te adoro, solo frases...
Y ya, no falsificamos.
...
Nada,  a ti reprocho,
el sol nace cada día
y tendrás otro cariño,
repetirás las frases
que otra vez has dicho
tus manos tan suaves
de otro ya serán
tus labios tan ardientes
besando con pasión
confirmará que de el,
es tu corazón.
...
La fe, que tanto hablamos,
me dio esta sorpresa,
y como el sentir es libre e indefinido...
Al morir un gran cariño, es que otro amor
ha  nacido.
...
Ya, no te canso, lo último que te digo y nombro,
está aquí, dentro mismo,
no habrá mas cartas, no habrá poesía,
ha muerto el sueño y la ilusión del alma mía.
...
Lo nuestro, ha terminado
como el triste amanecer de cada día,
la luz del sol, era nuestro amor,
la oscuridad de la noche,
nuestra agonía.
...
Y ese, nuestro crepúsculo
se anunció hace tantos días,
a la luz del sol, se impusieron
las tinieblas de la noche,
y con voz queda y sin reproches...
Te digo adiós a ti,
adiós te digo, en este día.


Jorge Naonse 1967/1969

ESOS DIAS

Como dulce y tímida gacela
ví asomarte en esos   dias
vida diste  a mi alma entera...
Con  sonrisas colmaste mi alegría.

Bellos tiempos allí, mi vieja Urquiza,
plenos dias, reflejaban tanto esnueño,
enteras tardes de luz y de sonrisas...
En esos dias,  me sentí y fuí tu dueño.

Unir pudimos nuestros sueños,
con plenos lazos de ternura,
el mismo afán, el mismo empeño...
Amalgamar hicimos, nuestra locura.

Fuimos sol y dulce calma,
también fuimos sentimiento,
nido de amor en nuestras almas...
Fuego latente por los tiempos.

Instantes fugaces y bellos encuentros,
hermosas tardes de amor y pasión,
escuchar tu voz y decir te quiero...
Y  fuiste abrasando mi corazón.

Primavera de dulces sueños,
aferrados tu y yo en el camino,
nunca dejé de ser tu dueño...
Y los dos en uno, mismo destino.

Atardeceres, de encanto y ternura,
despertabas mi alma a todo momento,
tan dulces frases y un alma tan pura...
De mi te adueñaste, y mi sentimiento.

José Gennaro  
Derechos Reservados

sábado, 14 de enero de 2012

Perdida primavera

Busco la noche,
en la intrincada selva,
deforme maraña,
de mi sutil camino,
afán de mis quebrantos, 
invade el pensamiento,
perfil de mi inconciencia
raíz de mi destino.
...
Elevo la mirada
hacia el inmenso cielo,
y solo sombras veo
cubiertas de follaje,
árboles adustos
sin aves en su vuelo,
mi ser se desvanece
ya falto de coraje.
...
Oteando el horizonte,
solo noche veo,
las pálidas estrellas
parecen ocultarse,
la luna temerosa
prefiere no mostrarse,
tristezas me dominan,
locura y devaneo.
...
Como quisiera mi alma
un tenue amanecer,
la infinita calma
volver a ver quisiera,
dejar por siempre sombras
en este anochecer,
y ver nacer de nuevo
perdida primavera.
...
Jorge Naonse  2012










domingo, 8 de enero de 2012

El comienzo

A tí  graciosa muchachita,
veraz ilusión que presiento,
en letras quiero expresarte
esto que nace en mi, y lo siento.

Sí, muchachita triste y soñadora,
suave muñeca, y delicada voz, 
en esa noche no tan serena,
me contabas, tu amarga pena.
El mundo estaba alegre
la gente toda se reía,
tú y yo, en esa mesa,
sin percatar que sucedía.
Al mirar tus ojos, ver tu rostro feliz,
sentir que un nuevo amanecer
naciera tan solo para mi,
y como fénix tu resurgieras.

En ti he visto la tristeza,
en ti sentí, la alegría y  el amor
en tus ojos profundos e intensos
tan plenos de ternura infinita
fluye esa mágica llama
con todo el encanto y esplendor...
Graciosa, graciosa y dulce muchachita.

Muchas horas juntos,
ya, nos amábamos,
desde ese dia
en ese baile nos miramos,
y tú, tenías tu pena y yo la mia.

¿Quién iba a imaginarse  ese dia?
Nos encontrábamos, y donde estábamos?

En un mar de gente en este mundo,
pleno de rosas espinas y de pena,
al fijar mis ojos en ti pensé, es una nena,
y que equivocado estaba, era mentira.

Así, nos conocimos esa noche,
tan plena de lluvia y negro cielo,
almas gemelas tan llenas de pena,
jamás imaginé, en ese dia...
Fundiéramos dos penas, en un anhelo.



José Gennaro 1967